Los clubes de la capital sufren una racha de sucesos delictivos que parece no tener fin. Y otra vez el blanco fue Maronese. Este miércoles a la noche rompieron caños, robaron un par de metros del alambrado y se pudo recuperar un tanque, ya que los colaboradores que cuidan las instalaciones lograron divisar a los ladrones.
“Así estamos. A cualquier hora, a las corridas, entre la angustia y mucha bronca”, afirmaron desde el club del oeste capitalino, que hace unos días sufrió el robo de una máquina mezcladora, que aún no estaba pagada (luego repuesta por la familia Ricomini).
En medio de un parate que desacomoda las cuentas y deja números en rojo, Maro trata de seguir en acción, con obras y mantenimiento en el predio. Sin embargo, esto pone trabas y complica a aún más el futuro.
La situación está descontrolada, ya que a lo largo e la cuarentena, hubo robos en la Federación de Patín, Independiente y, durante los últimos días en Eucalipto Blanco, que sufrió la pérdida e 13 reflectores.