Por Diego Lores
Era el más joven de todo el autódromo y terminó en lo más alto del podio. El pasado domingo, Tiago Chiriotti se quedó con la final de la Clase 2 del Turismo Pista Neuquino y consiguió su primera gran alegría en su prometedora carrera deportiva.
Nacido el 31 de enero de 2008 (tiene apenas 16 años) y residente en Centenario, Chiriotti ya venía asomando en las primeras fechas del año, en la atractiva categoría de los Fiat 1.4. La victoria se le venía negando, pero estaba al caer y finalmente llegó este fin de semana.
Fue su tercera presentación del año en una categoría que lleva disputadas cuatro carreras en el presente calendario. Y los números de Tiago son elocuentes: hizo las últimas dos pole positions, ganó dos series y se quedó con el récord de vuelta en sus tres presentaciones.
Chiriotti venía de un fin de semana desafortunado, cuando en la tercera fecha se vio perjudicado por un toque involuntario de su compañero de equipo, Iván Eberle. Por eso, necesitaba subirse nuevamente al auto para demostrar toda su capacidad y poder redondear un gran resultado.
Y así ocurrió. Fue contundente de entrada y se quedó con la pole position en la clasificación del sábado y con la serie del domingo. En la final no tuvo una buena largada, pero se supo recuperar, aprovechó errores ajenos y terminó celebrando desde lo más alto del podio.
En su visita a LU5 Radio Neuquén, revivió su victoria en Auto Uno, el programa de Chingolo Gribaudo. “A medida que pasaron las vueltas, el auto fue tomando ritmo. Analicé a mis rivales, los iba mirando para encontrar el lugar de sobrepaso. Por suerte lo pude concretar y terminé festejando”.
Desde febrero de este año -y luego de haber sido bicampeón del Prokart- Chiriotti participa de la Fórmula 3 Metropolitana, donde ya estuvo presente en nueve fechas. Mientras, analiza su futuro. Comenzar con la escalera de la ACTC es una de las alternativas, pero no descarta concretar su gran sueño, que es correr en Europa.
Por lo pronto, se dio el lujo de celebrar en Centenario, y lejos de conformarse, va por más. Quiere ser campeón de la 1.4 y progresar carrera a carrera, para engrandecer sus sueños de piloto de primer nivel.