Unión Florida puede chapear con su invicto o con la presencia de la extraordinaria Carla Miculka, sin dudas la jugadora más determinante del torneo. Pacífico está en condiciones de responder con números asombrosos, variantes y más millas recorridas. Son las mejores de la Liga Federal Femenina de Básquet y el domingo 10 a las 17, en el Polideportivo Islas Malvinas de Mar del Plata, dejarán la piel para quedarse con el trofeo.
Si bien es cierto que las chicas de Vicente López llegan con un inmaculado 15-0, saben lo que es sufrir y varios partidos los ganaron sobre la chicharra. De hecho, el que definió el pase a la final, ante Berazategui, fue por la mínima (54-53).
Antes, durante la fase regular, aparece un punto de coincidencia llamado Vélez. Es el único equipo que se enfrentó con las finalistas y se vivieron diferentes situaciones. Florida sufrió en el arranque del certamen y triunfo por 6 (53-47) como local, pero fue contundente cuando cruzó la General Paz y ganó 71-52, ya con un andar tremendo. En el Viejo Ramírez, las Decanas mostraron todo su potencial y clasificaron a la final con un sólido 67-49.
Es muy cierta esa historia de que las estadísticas no son determinantes y más aún en una definición como esta, a partido único. Sin embargo, siempre están ahí, a mano, y dan muchas señales. La de Miculka es determinante porque su apellido aparece en el top de puntos o rebotes de los 15 partidos disputados por UF a lo largo de la temporada. Con papeles más secundarios, en el equipo de Nicolás Grosso aparecen Julieta Serna, Delfina Saravia o Giuliana Baccarelli.
Ahí Pacífico tiene más variantes, con Jacqueline Soto al tope, pero una larga lista que incluye a Candela Zampedri, Guadalupe Soto, Nadia Fretes y, en los últimos juegos, las más nuevas Candela Foresto y Ailín Astorga, que sin dudas le dieron una gran cuota de calidad al conjunto de Maxi Rubio.
En la previa, Florida tiene más experiencia y rodaje en este tipo de competencias, además de un invicto que puede pesar. Pero Pacífico quiere hacer historia, demostró que se agranda en las difíciles y va por todo.