La natación es una de las disciplinas que clama por volver y la ilusión de estar en el próximo grupo autorizado crece con el correr de las horas. Hay que analizar protocolos, usar como ejemplos los de otros lugares del país y ahí se verá si Neuquén está en condiciones de reabrir sus piletas.
“La situación es muy compleja, no sólo para la natación de la provincia sino para todo el país. Sí o sí se necesita el entrenamiento en una pileta y por eso es difícil sostener rutinas”, afirmó Sebastián Rearte, técnico del equipo de Alta Barda.
Con una lógica preocupación, el DT agregó que “para recuperar el nivel que teníamos vamos a necesitar, como mínimo, 20 semanas. Prácticamente va a ser un año perdido, pero estamos en una situación en la que tenemos que priorizar la salud”.
En el mientras tanto, Rearte comentó que “tenemos reuniones, tratando de motivar a los seleccionados y por suerte los chicos entienden la situación. Ya se ha presentado un protocolo a la municipalidad y las autoridades son los que tienen la última palabra”.
“Todos los que vivimos del deporte estamos en una situación muy compleja. Confiamos en que la provincia y las autoridades de sanidad nos den el visto bueno en los próximos días”, siguió.
El equipo del alto neuquino alcanzó a competir en dos torneos nacionales. Los cadetes estuvieron en SITAS de Buenos Aires y antes los infantiles y menores fueron de la partida en el tradicional “Harold Barrio”, disputado en natatorio Georgina Bardach de Córdoba.
Después llegó el parate y ahora no queda otra que esperar buenas señales. “Nos llevará un tiempo largo volver al nivel que teníamos. No tenemos mucho para hacer en estos momentos. Fueron 70 y pico de días con mucho zoom, nutricionista, psicólogo y todo lo que pudimos hacer para contener a los chicos”, cerró Rearte.