Iñaki Basiloff tuvo su tercera carrera en los Juegos Paralímpicos París 2024. Fue en los 100 metros espalda, terminó en el octavo lugar y así se aseguró el diploma olímpico. En una carrera que no es su especialidad, el nadador neuquino logró clasificarse a la final y tuvo dos performances muy parecidas. El 1-2 fue ucraniano con Yurii Shenhur y Andrii Trusov, mientras que Federico Bicelli se quedó con la medalla de bronce.
Ahora, Basiloff tendrá varias jornadas de descanso, porque recién competirá el sábado, en los 100 metros mariposa. A priori es otra prueba donde las posibilidades de hacer podio son remotas, pero el neuquino ya demostró que está en condiciones de sorprender. Seguramente irá por todo en su última función en París.
En la serie de la madrugada argentina, Iñaki fue cuarto con un registro de 1.15.86. Participó en la segunda manga y quedó detrás del italiano Federico Bicelli (1.14.37), el ucraniano Andrii Trusov (1.14.60) y el letón Jurijs Semjonovs (1.14.68).
Desde la largada, la lucha se centró entre los ucranianos y finalmente Shenhur le ganó por buen margen a Trusov: 1.09.51 a 1.10.42. Muy lejos entró Bicelli, el dueño del oro en los 400, con 1.12.23. Más atrás se escalonaron Aleksei Ganuik (1.12.56), Christian Sadie (1.13.03), Yevhenii Bohodaiko (1.13.89), Jurijs Semjonovs (1.14.76) y Basiloff (1.15.87).
La producción de Basiloff en París fue la mejor de la delegación argentina, porque sorprendió en los 200 metros combinados y metió bronce en los 400 libres. El propio nadador admitió que su objetivo era inverso: “Hubiera firmado el oro en los 400 y el bronce en los 400”, dijo en declaraciones a TyC Sports, minutos después de colgarse la segunda presea en la capital francesa.