Neuquén cerró su participación en los Juegos Evita y metió un capicúa: totalizó 31 medallas, 13 de las cuales fueron de oro. Completó su cosecha con 10 de plata y 8 de bronce, en una producción más que positiva para la delegación, que estuvo integrada por más de 800 deportistas.
A pesar de que los equipos fueron del ámbito comunitario, clasificados en los Juegos Integrados Neuquinos, los chicos dejaron una buena imagen, ante muchas provincias que presentaron atletas federados. Se compitió en 30 disciplinas.
En el cierre del programa, Ezequiel Vidal se colgó la medalla de oro en boxeo. Como a lo largo de toda la competencia, marcó claras diferencias sobre sus adversarios y en la final superó al chaqueño Javier Trangoni. La definición, otra vez, fue por RSC (referí suspende combate) en el primer round.
El hijo del excampeón argentino Fabio “Pucará” Vidal ganó cuatro de sus cinco peleas por la vía rápida y fue una de las figuras en todas las jornadas. Con este oro, el boxeo vuelve al medallero luego de tres años sin podios en los Evita.
En los otros deportes de contaco, como ocurrió en los últimos años también hubo medallas. Benjamín Correa logró la presea de plata en lucha grecorromana y bronce, con Donato Martín en taekwondo, categoría hasta 53 kilos, y Carla Mariqueo, en judo en la misma división categoría.