“La camiseta del Rojo me la voy a llevar a todos lados”

Rojo hasta la médula. ¿Alguna duda? (Marías Subat-Independiente de Neuquén Básquet)

Por Cristian Helou

Claro que sí, Marulo!!! Con el permiso del área de prensa de Independiente, el arranque del posteo sirve como anillo al dedo para explicar la gran posibilidad que se le presenta a Drazen Sinigoj, quien seguirá su carrera en el básquet de los Estados Unidos. Canterano de esos que no se empardan, de sangre roja indeleble, de dormir con la pelota al lado de la almohada y de escuchar sin parar conceptos del viejo, Facundo, el perimetral es querido, admirado y por eso la noticia cayó con ese mix de alegría extrema por un lado, pero cero sorpresa por otro: la partida de Marulo era una fija.

“Ahora que me pongo a ver todo el proceso que hice en el club, la verdad es que son muchas enseñanzas. Es un orgullo. La camiseta del Rojo me la voy a llevar a todos lados”, fue la reacción de Drazen al ver la publicación en las redes.

Por estas horas, el basquetbolista de 16 años está a full. Sigue con los entrenamientos porque antes del viaje de fines de agosto estará el Panamericano con la selección Argentina. “Estoy por ir a Buenos Aires para hacer la visa, pero no puedo ni quiero aflojar. Se vienen meses muy intensos”, afirmó.

Sostener el nivel que alcanzó en el último Federal es el primer objetivo de Drazen. (Archivo Matías Subat)

El Mount Carmel School de Baltimore será su equipo durante las próximas dos temporadas y Drazen, en simultáneo, terminará de cursar cuarto y quinto año. ¿Cómo se dio la chance? “La Fundación Creser se contactó con mi viejo, le comentaron que estaban en la búsqueda de un jugador perimetral, de más de 1.90, y se dio”, respondió. Entre risas agregó que sus 1,91 metros “son reales”, lejos de esa repetida historia de los extranjeros que llegan al país y bajan centímetros durante el largo vuelo.

Sobre la decisión de ir al país del norte, comentó: “Siempre pongo la vara lo más salto posible y Estados Unidos es lo mejor. En enero se contactaron conmigo para ir a Italia, pero me parecía que era muy temprano y decidí quedarme”.

Sabe que se le viene un “básquet muy distinto, individual, muy físico” y por eso el primer objetivo pasa por “sostener el buen nivel que alcancé en los últimos tiempos”, cuando encontró continuidad en el Torneo Federal con la camiseta del Rojo.

Ese certamen fue clave para consolidarse en los dos puestos del perímetro. “Tengo la oportunidad de jugar tanto de base como de escolta y eso seguramente te da más chances”, opinó.

Así como a lo largo de todo su camino por el club, esta última competencia le dejó enseñanzas: “Hicimos una buena temporada, tanto en lo personal como en lo colectivo. Todos crecimos en lo deportivo, pero creo que a partir de todo lo rara que fue nos hizo unirnos y ser más humanos”.

En tiempos de armado de valijas de manera constante, Drazen tiene una escala en suelo porteño para finalizar todos los trámites del viaje. El inglés lo maneja desde “tercer grado porque voy a una escuela bilingüe”, pero sabe que se viene un período de adaptación. “Va a ser todo nuevo. La ciudad, el entrenador, el equipo, todo…,”.

Sinigoj está listo para el desafío. Eligió una opción llena de complejidades, pero allá va. La puede romper y también fallar. Pero lo más importante es que lo intentará y dejará todo. Desde que se puso la camiseta del Rojo, se veía venir este momento. Claro que sí, Marulo!!

EL POSTEO DEL CLUB

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