El Gobierno japonés aseguró este lunes, a 200 días de los Juegos Olímpicos, que podría declarar el estado de emergencia en Tokio por el aumento de casos de coronavirus, lo que arroja nuevas dudas sobre si se puede seguir adelante con la organización del evento previsto para el 23 de julio.
La declaración de emergencia supondría un paso atrás para el primer ministro, Yoshihide Suga, quien hasta ahora se ha resistido a tomar una medida tan drástica pese a las críticas de que el gobierno estaba tardando en actuar, destaca el diario español Mundo Deportivo.
El pasado 31 de diciembre se registró un récord de 4.520 nuevos casos de Covid-19 en Japón, lo que llevó a la capital Tokio y a tres prefecturas vecinas a solicitar una declaración de emergencia al gobierno nacional.
El domingo hubo 3.158 nuevos casos, según la emisora pública NHK, y casi la mitad de esos contagios se dieron en Tokio y sus alrededores.
“Durante los tres días de las vacaciones de Año Nuevo los casos no se redujeron en el área del gran Tokio”, dijo Suga en una conferencia de prensa. “Sentimos que se necesita un mensaje más fuerte”, añadió, cuando se le pidió que explicara el cambio de opinión sobre una posible declaración de emergencia.
Aunque las cifras son muy bajas en comparación con las de muchas partes de Europa y América, Suga tiene el desafío de albergar los Juegos Olímpicos en Tokio en el verano boreal después de la suspensión de la cita olímpica en 2020.
La tarea se tornó más compleja tras el descubrimiento, el mes pasado en el Reino Unido, de una nueva cepa de coronavirus, más contagiosa que la primera, lo que hizo que Japón prohibiera temporalmente la entrada al país de los extranjeros no residentes.
Aun así, Suga repitió la promesa de continuar con los preparativos de los Juegos y adelantó que el país tendrá como objetivo comenzar a vacunar a los residentes a finales de febrero.