Iñaki Basiloff, el único neuquino que dijo presente en Tokio 2020, volvió a casa y fue recibido por su gente. Familiares, amigos y vecinos esperaron al nadador, quien tuvo una brillante actuación en los Paralímpicos y llenó el bolso de diplomas: fueron cuatro, dos a centésimas de la medalla de bronce y otro par en pruebas de corta distancia para cerrar una gran producción. Con solo 20 años, hizo historia y ahora va por más.
A pesar del cansancio, Iñaki se hizo tiempo para saludar a cada uno de los integrantes de su entorno más íntimo e incluso se animó a decir unas palabras al frente de casa. Pieza clave de la selección Argentina y habitué en todas las competencias internacionales, en tierras niponas demostró que tiene un gran potencial.
Ahora es tiempo de descanso y después, seguramente afrontará nuevos desafíos, tanto en River como en Cipolletti, sus clubes. Los Parapanamericanos de Santiago y el Mundial 2023 son los torneos top en el horizonte y ahí apuntarán todas las miradas. Por lo pronto, Basiloff sacó mucho más que un aprobado en Tokio y tuvo múltiples premios: un cuarteto de diplomas, el reconocimiento a nivel internacional y, claro, el apoyo incondicional de su gente.
Fotos: Ministerio de Deportes
