Por Cristian Helou
La mayoría de los patinadores deshojan la margarita antes de transformarse en fondista o velocista. No es el caso de Gonzalo Villalba, quien siempre supo que lo suyo era la explosión. Así empezó en Gregorio Álvarez y siguió en Alta Barda hasta que llegó esa soñado convocatoria a la selección Argentina. Forma parte del equipo de juveniles y cambio de planes mediante por la nueva fecha (febrero 2022), trabaja a fondo para el Sudamericano sobre Ruedas que se cumplirá en San Juan.
“La verdad es que fue un alivio, estaba con los nervios a full y no me sentía preparado para el desafío. Tuve un bajón hace un tiempito, pero ya pasó y estamos firmes, trabajando muy duro para lo que viene”, arrancó Gonzalo en declaraciones a Radio Nacional Neuquén (103.3).
El patinador de 17 años cumple al pie de la letra con la rutina semanal, que incluye prácticas en el club y también con los y las seleccionadas en la pista de Ciudad Deportiva, bajo el mando de Rosana Sastre y Marina Baca Cau, su DT del club.
Multicampeón con Alta Barda y la selección de Neuquén, Gonza va por su primer gran objetivo internacional. Y obviamente lo disfruta. “Cuando me llamaron estaba en mi casa y obviamente me largué a llorar. Fue una emoción muy grande, que compartí con mi familia. Es impresionante saber que vas a vestir la celeste y blanca”, relató.
Gonzalo estuvo en la concentración de los juveniles en Mar del Plata y volvió con balance positivo. “Estuvo muy bueno, me pudo adaptar bien a la pista y me apoyé en los consejos que me dieron los más grandes. Fue una linda experiencia”, contó.
Luego de un año en Gregorio, mudo sus ilusiones a Alta Barda y contó la historia: “Arranqué en roller y parecía que ya sabía patinar. En los Provinciales les sacaba mucha diferencia a los rivales, ahí me vieron de Alta Barda y me llevaron. Me costó al principio, pero le agarré la mano y llegaron los resultados”.
“Siempre fue velocista –agregó-. Creo que más que nada se dio porque no tenía aguante (risas). No sé por qué se dio así, pero siempre tuve mucha reacción y explosión en la largada”.
Los 100, 200 y 500 metros son sus pruebas preferidas, aunque también será de la partida en los 1.000. “Será un torneo muy difícil porque van a venir los mejore del continente, pero me tengo fe en los 200”, cerró Villalba, antes de agarrar el bolso y salir a entrenar. Un clásico de todos los días, con un objetivo clarísimo: disfrutar su primera experiencia internacional con la Albiceleste pegada al cuerpo.
