Desde el próximo viernes 5, la selección Argentina de goalball concentrará en Neuquén. El equipo, que tiene como gran objetivo ir a los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021, que se pondrán en marcha a fines de agosto, tiene como capitana a la local Lorena Magaño, quien en las últimas horas realizó un reconocimiento del espacio de entrenamiento.
“Recibiremos a las nueve integrantes del seleccionado nacional más el cuerpo técnico”, adelantó Lorena, quien agregó que “la concentración será la primera del año con vistas a los Panamericanos de San Pablo”, que dará plazas para la máxima cita mundial y Las Topas sueñan en grande.
“Intentaremos aplicar en la cancha todo lo que este año hemos aprendido vía zoom y esperamos que esta primera concentración nos ayude a tener una buena preparación para obtener buenos resultados”, se ilusionó.
“Con esta concentración –agregó- queremos aprovechar la oportunidad para dar a conocer el goalball, que es un deporte muy atractivo, explosivo, que requiere mucha preparación física, mucha coordinación, mucha técnica, que se realiza en un ambiente de mucho silencio y se juega con una pelota sonora, en un espacio que tiene las dimensiones de una cancha de vóley, con referencias táctiles que nos permiten orientarnos y jugar en equipo”..
Luis Sánchez, ministro de Deportes, afirmó que “es un orgullo tener a este seleccionado en nuestra casa de la misma manera que cuando recibimos a River en San Martín de los Andes o a las chicas del seleccionado argentino demostrando una vez más que la mirada patagónica está puesta en Neuquén”.
Además de Magaña estarán Mailén Benítez, Luján Almada, María Almada, Soledad Almada, Sandra Villegas Lión, Geraldine Roberts, Guadalupe Romero Criado, Belén Zanitti y Romina Cardozo. La entrenadora de Las Topas es Irina Versele, mientras que Leopoldina Capo y Argentina Araujo completan el cuerpo técnico.
¿Qué es goalball?: Es el único deporte para personas con discapacidad visual que no es adaptado ya que no tiene una versión convencional. Sus orígenes se remontan a finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando fue creado para rehabilitar a aquellas personas que habían quedado ciegas o con visión disminuida producto de las heridas de combate. Con el tiempo, la actividad fue creciendo y en los Juegos de Toronto 1976 se la incluyó como disciplina paralímpica. En 80 comenzó se desarrolló la rama femenina.
Info y fotos: Ministerio de Deportes