Básquet 2021: incertidumbre, el 8E como fecha clave y un vecino menos (Sol de Mayo)

Sol de Mayo no participará del Torneo Federal y Pacífico seguirá por el mismo camino.

 

El básquet de ascenso, ese que involucra a los equipos neuquinos, tuvo algo de data en el final del 2020. Apareció una “alternativa” en la Liga Argentina y un bosquejo del Torneo Federal, pero la única realidad es que todo está en análisis. Hay intenciones de participar y todos le sacan punta al lápiz.

En el medio, la zona Patagonia ya confirmó una baja. Es la de sol de Mayo de Viedma, que en la última edición del TFB fue gran protagonista y, de hecho, lideró hasta las últimas fechas, cuando Pérfora, en gran remontada, se adueñó de la punta. El quinteto de la capital rionegrina, que incluso coqueteó con una aventura en la Liga Argentina, ni siquiera será de la partida en el tercer escalón del básquet nacional.

Sin dudas, la ausencia de equipos cercanos (Atenas y Deportivo Viedma seguirán en la LA), llevó a los dirigentes a tomar la decisión. “Le vamos a prioridad a la refacción de las instalaciones de 25 de Mayo y Alsina”, le dijo el dirigente Ronald Speciale al programa “En el Ángulo” y así se registró la primera baja en la Patagonia.

¿Puede ocurrir lo mismo por estos lares? Si bien es cierto que no está el problema de la distancia (Pérfora es el más lejano, porque Centenario, Independiente, Pacífico, Cipolletti y Cinco Saltos son vecinos), todavía reina la incertidumbre.

“Creo que el 8 de enero (fecha tope para confirmar la participación) veremos todos dónde estamos parados, para poder calcular un presupuesto”, afirmó Luis Osés, dirigente del Rojo, como para poner un poco de claridad en medio de muchas dudas.

En la Colonia se sostiene la idea de ir por un segundo Federal y el Verde, de asistencia perfecta, también es fija. El Decano es, lejos, el más complicado. Hay silenzio stampa y se habla de un recambio dirigencia, pero las elecciones son en octubre. Ante esto, tendría un pie y medio afuera de la competencia.

En la Liga Argentina, por su parte, Centro Español y Petrolero insisten en mantener su lugar y un apoyo de los clubes de la categoría podría servir como empujón hacia una nueva participación. Esto choca con una actualidad muy complicada: sus planteles quedaron desarmados, no hay soluciones a la vista y el formato de burbujas, con sedes fijas, no convence a los dirigentes.

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