Por Cristian Helou
La Confederación Argentina de Básquet y la Asociación de Clubes tiraron los bosquejos arriba de la mesa y llegó la hora de decidir. De movida hay que saber quién se anima a jugar y después en qué categoría lo harán los neuquinos que en los últimos años tuvieron chapa nacional. Conocidos los proyectos (en realidad alternativas), va una idea: ¡Los seis al Torneo Federal 2021!
Está claro que los primeros en saltar ante esta opción serían Centro Español y Petrolero, que vienen de disputar la Liga Argentina y por eso significaría un paso atrás en lo deportivo. Sin embargo, la realidad muestra que fueron los únicos dos, sobre 28 clubes, que no confirmaron su participación, están complicados con los números y casi no quedan integrantes de sus últimos planteles.
Nadie puede negar que ambos fueron protagonistas (especialmente el Torito) y que cumplieron en la cancha. Tuvieron buenas convocatorias, los equipos se identificaron con la ciudad y muchos chicos de la casa llegaron a primera. Todo eso chocó con una situación extrema: la económica. En nueve meses, no pudieron (ni supieron) acomodar los tantos, entonces no se debería caer ningún anillo por jugar el Federal. Al fin y al cabo, los dos adquirieron plaza para jugar la Liga Argentina.
Cuarteto Federal: La situación de los representantes neuquinos en el último TFB es claramente dispar. Independiente goza de buena salud, a tal punto que mira de reojo la LA y, a priori, tiene un plantel armado. A Centenario no le pesó el cartel de novato y está dispuesto a ir por una segunda participación. Pérfora tiene que saldar cuentas, pero su sueño de seguir con asistencia perfecta en el Federal es indeleble. Y Pacífico, que parecía nocaut, podría hacer el intento de participar.
Los cuatro, sin dudas, cumplieron en lo deportivo, y le dieron forma a una división Patagonia que fue de las más competitivas del país. El Verde, de hecho, terminó en lo más alto hasta que la pandemia cortó con toda inspiración. Cente sacó un aprobado, el Rojo recuperó terreno en los últimos juegos y el Decano iba derechito a los play offs. Un par está listo, el otro con dificultades, pero a partir de una regionalización favorable, no es descabellado pensar en un pleno para la continuidad.
Ocho, situación ideal: Si la movida del sexteto fluye y se suman los vecinos Cipolletti y Cinco Saltos, quedaría una zona norpatagónica de ocho equipos, separados por una distancia que tiene 125 kilómetros de máxima (Plaza Huincul-Cinco Saltos). Y un grupo con esta cantidad de clubes es ideal. No quedarían libres, se podría jugar viernes y domingo de manera continua, a cuatro ruedas. 28 partidos para todos y plaga de clásicos (o cuasi). Sería, ni más ni menos, que un Integración camuflado. Sin dudas, un torneo que serviría de despegue para una actividad que está frenada hace nueve meses y que necesita un revulsivo. Las inscripciones para el TFB cierran el 8 de enero. Los dirigentes tienen la palabra.
