Por Marina Butrón (Télam)
“Mientras el mundo del fútbol habla de Messi, nosotras hablamos de ESI”. San Lorenzo feminista, agrupación de socias e hinchas por un club equitativo, inclusivo, diverso y social, tuvo un conversatorio sobre Educación Sexual Integral con la especialista Celeste Mac Dougall, justo cuando el fútbol mundial tenía puesto el foco en el conflicto de Lionel Messi con el Barcelona.
Los avances del movimiento feminista en los clubes incluyen la creación de áreas de Género y Diversidad, protocolos de acción contra las violencias y la implementación de la Ley Micaela. Sin embargo, la ESI -obligatoria en los establecimientos escolares desde el 2006 por la ley 26.150- es una demanda pendiente en el ámbito del fútbol.
“La mayoría de nosotras nunca tuvo ESI. Hicimos una breve encuesta interna y más de la mitad (59,2%) aseguró no haber tenido Educación Sexual Integral en ningún momento de la vida educativa”, revelan desde San Lorenzo feminista.
Esa agrupación nació en 2019 y es uno de los muchos espacios que compone la Coordinadora Sin Fronteras de Fútbol Feminista, una organización que se creó en el Encuentro Nacional de Mujeres en Trelew 2018 y que nuclea a jugadoras de todas la edades, hinchas, dirigentas y DT’s. La Coordinadora, además, adhiere al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
“La ESI incluye y tiene abordajes específicos de la educación física. Y es para todo el mundo, no solamente tiene que estar en el ámbito escolar sino que es una ley y un derecho que debe impactar en otras instituciones donde las personas se vinculan y educan, como por ejemplo los clubes de fútbol”, dijo la docente Mac Dougall.
“La competencia deportiva tiene una conceptualización muy machista. En la Provincia de Buenos Aires hace años que no existe clase de educación física para varones y mujeres, están mezclados. El deporte no puede estar pensado en función de dar respuestas a cuerpos biológicos sino al revés. Debe favorecer a lograr inclusión”, agregó.
River y Vélez son clubes que, además, tienen institutos de educación primaria, secundaria y terciaria. La abogada Paula Ojeda, responsable del área de violencia de género del Fortín, contó: “Hacemos ESI por medio del instituto educacional. Generalmente desde el área de Género colaboramos con alguna temática, hacemos jornadas de ESI e invitamos a distintas entidades, pero en el club en sí no lo trabajamos”.
Independiente, por caso, recién abrió su departamento de Género en julio de este año. Los abusos en la pensión del club de Avellaneda, que salieron a la luz en 2018, fueron una alarma para otros clubes.
Yael Bendel, asesora general del Ministerio Público Tutelar, aclaró: “A partir de lo que pasó en Independiente pusimos más atención en las pensiones y comenzamos una relación más fluida con los clubes, en el derecho de los chicos, en la educación, en los talleres con profes de deportes donde el foco no está puesto específicamente en el rendimiento deportivo”.
El Ministerio informó que un total de 1.433 personas recibieron talleres de ESI durante 2019/20, entre ellas las pensiones de River y Vélez, Boca, San Lorenzo, Argentinos, Huracán y Náutico Hacoaj.
Boca, en su departamento de Inclusión e Igualdad, tendrá por primera vez charlas virtuales de ESI, métodos anticonceptivos y sexualidad sin violencia, en las próximas semanas.
Otros clubes, los menos, están avanzados en ESI gracias a trabajadoras sociales que forman parte de la Coordinadora. Es el caso de Rosario Central y Unión de Santa Fe.
Natalia Lascialandare, licenciada en trabajo social, explicó la experiencia en Central: “Tenemos una instancia de trabajo anual con las divisiones inferiores hace cuatro años. La perspectiva de la Casa Club está desarrollada con un enfoque de derecho y géneros. Desde allí que la ESI es entendida como un aspecto a abordar con las adolescencias y las juventudes”.
Central, que en 2019 abordó las redes sociales y su uso responsable para prevenir situaciones de abuso o acoso, se maneja con una línea de trabajo inter-institucional con las escuelas de la comunidad, más puntualmente a la que acuden la mayoría de los jóvenes del club.
Para Stella Maris Quirós, educadora popular y trabajadora social en Unión, los adolescentes, que además de ser futbolistas viven en el club, en “La Casa del Jugador” lejos de sus familias, son los más vulnerables.
“Ahí es donde entra el trabajo social como profesión, se desarrolla desde una perspectiva de inclusión y protección de derechos, por lo que consideramos que el acceso a la ESI es indispensable”, explicó.
“Algunos piensan que como la ESI se aborda en las escuelas primarias y secundarias, ya es suficiente. Nosotros como equipo interdisciplinario en el club promovemos e instalamos en agenda los temas de ESI, la violencia de género, las relaciones sexo-afectivas y todo lo referido a las relaciones y manifestaciones adolescentes con perspectiva de género. En Unión ya es una política institucional”, aseguró Quirós.
En Unión se trabaja un día por semana con las temáticas referidas, con presencia de psicólogos deportivos, en todas las categorías desde la reserva hasta la octava división.
También hay encuentros semanales con todos los adultos que tienen contacto con los jugadores del club: coordinadores, entrenadores, nutricionistas, médicos, kinesiólogos, cocinero y celador de La Casa del Jugador, utileros y psicólogos.
Desde abril de 2020, estos encuentros se realizan por Zoom y “nunca dejaron de hacerse porque se considera un día más de entrenamiento y es obligatorio”.